“Irán nunca ha llevado a cabo acciones peligrosas en el espacio cibernético, ya que está en contra de este tipo de medidas”, ha declarado este sábado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Husein Yaber Ansari, en alusión a los siete presuntos piratas informáticos iraníes acusados por el Departamento de Justicia estadounidense de atacar bancos de EE.UU. y una presa en la ciudad de Nueva York, sita en el noreste del país.
El jueves el Departamento de Justicia de EE.UU. anunció que había abierto una investigación en relación con siete iraníes acusados de actos de sabotaje en Estados Unidos.
“Irán nunca ha llevado a cabo acciones peligrosas en el espacio cibernético, ya que está en contra de este tipo de medidas”, ha declarado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Husein Yaber Ansari.
La demanda también sostiene que “los siete presuntos piratas informáticos son empleados de compañías de seguridad informática que trabajan para el Gobierno de Irán, en particular para el Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI)”.
#EEUU acusa a 7 presuntos hackers iraníes de atacar sistema financiero#Iran https://t.co/GROorUKjtl pic.twitter.com/YNjML9ST0o
— HispanTV (@Hispantv) March 24, 2016
“La República Islámica de Irán ha sido víctima en diversas ocasiones de ataques cibernéticos secundados por algunos gobiernos y se ha visto perjudicada. Además, siempre ha sido pionera de los esfuerzos internacionales para combatir los delitos cibernéticos, y ha insistido en la necesidad de regularizar el espacio cibernético bajo la supervisión de todos los gobiernos”, añade.
Por último, el diplomático iraní ha argumentado que Washington no está en posición de acusar a Irán.
“El Gobierno estadounidense ha puesto en peligro la vida de millones de personas con sus ataques cibernéticos contra las instalaciones nucleares de Irán (…), por eso creemos que no está en posición lanzar acusaciones de esta índole contra Irán”, ha recalcado.
Irán ha sufrido con anterioridad ciberataques por parte de Washington. En 2010, el país persa descubrió que algunas de sus centrifugadoras se habían visto contaminadas con el virus Stuxnet, desarrollado por EE.UU. y el régimen israelí; para varias empresas de seguridad cibernéticas, dicho virus es el más sofisticado del mundo.
mep/nii/