Según el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la hambruna es “inminente” en el norte de Gaza, donde el 70 % de la población experimenta un hambre catastrófica, y especifica que la desnutrición infantil está aumentando a un ritmo récord: uno de cada tres niños menores de dos años sufre desnutrición grave o emaciación.
“En ningún lugar del mundo hay tanta gente enfrentando una hambruna inminente. Aquí en la ciudad de Gaza estamos en el centro de la crisis. Hoy conocí a tanta gente que está enojada, cansada y desesperada porque sus hijos tienen que irse a la cama con hambre todas las noches”, dijo el martes Matthew Hollingsworth, director del PMA para Palestina.
Hollingsworth puso de relieve que el PMA solo ha enviado 11 convoyes de alimentos al norte de Gaza desde principios de año y subrayó que se debe entregar inmediatamente ayuda alimentaria en grandes cantidades a los territorios palestinos asediados.
La entrega de alimentos urge, agregó el funcionario, “si queremos evitar la hambruna, evitar más muertes, evitar la emaciación entre los niños, prevenir realmente la situación desesperada que ya existe”.
En toda la Franja de Gaza, el número de personas que enfrentan hambre catastrófica aumentó a 1,1 millones, la mitad de la población, indicó Hollingworth.
Un informe reciente respaldado por las Naciones Unidas alerta que la hambruna podría afectar el próximo mayo al norte de la Franja de Gaza, donde viven unas 300 000 personas.
El norte de Gaza, incluida la Ciudad de Gaza, fue el primer blanco de los bombardeos israelíes que dejaron vecindarios enteros arrasados. Actualmente, es el epicentro de la catástrofe humanitaria del enclave, y muchos residentes se han visto obligados a alimentarse con comida para animales. Al menos 27 personas, en su mayoría, niños, han muerto por desnutrición y deshidratación en el norte del territorio, según el Ministerio de Salud.
ght/ncl/mkh
