La jornada estuvo marcada por reticencia de los guatemaltecos a votar. Únicamente el 35 % de los empadronados acudió a las urnas para elegir al presidente y al vicepresidente en la segunda vuelta.
Las opciones: la ex primera dama de la nación Sandra Torres por el partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y el comediante Jimmy Morales por el partido Frente de Convergencia Nacional (FCN).
Las encuestas ya habían señalado al vencedor, quien se dirigió a la prensa al final del escrutinio.
Con una aplastante ventaja del 40 %, Jimmy Morales obtuvo 2,6 millones de votos mientras que Torres consiguió 1,3 millones de sufragios.
La comunidad internacional subraya el papel de la ciudadanía en el cumplimiento de los nuevos retos del Gobierno.
La cuestión agraria y la conflictividad social son problemas latentes en un país en el que el 60% de sus habitantes se reconoce indígena y donde se practican 22 idiomas mayas y es precisamente la falta de inclusión de estos temas en los programas del Gobierno de Morales lo que preocupa a los observadores indígenas.
Uno de los mayores retos que enfrentará el nuevo presidente de Guatemala es el financiamiento de sus promesas de campaña, pues los recursos son limitados y la recaudación tributaria es de las más bajas en Latinoamérica.
La ciudadanía guatemalteca que se ha expresado por diferentes medios de comunicación que no tolerará promesas incumplidas por parte del Ejecutivo entrante.
Miguel Salay, Ciudad de Guatemala.
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