Cientos de estudiantes del Complejo de Aprendizaje Miguel Contreras en el distrito de Westlake salieron de clase para participar en una marcha de protesta para condenar la violencia armada tras el tiroteo en una escuela de Texas que dejó 19 alumnos y dos maestros muertos.
En Estados Unidos, los tiroteos en las escuelas son un flagelo recurrente que los sucesivos gobiernos hasta ahora han sido incapaces de detener.
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