De acuerdo con Bild, la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA, por sus siglas en inglés) siguió espiando a Schroeder incluso después de que éste dejara el cargo en 2005 y se convirtiera en 2006 en el presidente del comité de accionistas de la empresa Nord Stream AG, controlada por Gazprom, el gigante energético ruso.
El motivo del interés de EE.UU. en el político germano era la amistad que mantenía con el mandatario ruso, y las agencias de inteligencia estadounidenses creían que a través del excanciller podían acceder a un mundo bastante cerrado que rodea a Putin, indica el periódico.

El exanalista de la NSA Edward Snowden divulgó en junio de 2013 decenas de miles de documentos clasificados como alto secreto sobre programas globales de espionaje masivo de la Inteligencia estadounidense.
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