• El portavoz del Gobierno iraní, Ali Rabii, ofrece una rueda de prensa en la capital, Teherán, 6 de julio de 2021. (Foto: IRNA)
Publicada: martes, 6 de julio de 2021 18:17

El Gobierno de Irán achaca a Israel el fallido acto de sabotaje contra una instalación nuclear iraní y dice que tuvo como objetivo detener los diálogos en Viena.

“El régimen sionista [de Israel] llevó a cabo estas medidas con la presunción de que podría dar a entender que puede detener el programa nuclear iraní y decir que el mundo no tiene necesidad alguna de negociar con Irán, pero cualquier acto de sabotaje ocurrido hasta ahora en el país solo ha reforzado nuestro poder [y voluntad para avanzar]”, ha subrayado este martes el portavoz del Gobierno iraní, Ali Rabii, en una rueda de prensa.

El fallido intento de “sabotaje” contra uno de los edificios pertenecientes a la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI) tuvo lugar el pasado 23 de junio en la ciudad de Karay, capital de la provincia de Alborz, fronteriza con Teherán (capital iraní), según informó entonces el portal de noticias local Nour News, detallando que el incidente no causó daños materiales y tampoco hubo que lamentar pérdidas humanas.

Rabii ha tachado de “inexactos” los informes de algunos medios de comunicación, que consideran enormes los daños causados por el ataque, mostrando una serie de fotos satelitales del sitio nuclear.

 

El vocero del Gobierno iraní no ha proporcionado detalles sobre cómo se produjo este acto de sabotaje, pero ha subrayado que el suceso ha dañado levemente el techo de un cobertizo del emplazamiento.

Los equipos importantes instalados en dicho sitio no han sufrido daño alguno, ha recalcado, además de señalar que las imágenes aéreas se tomaron cuando se retiró el techo dañado para su reparación.

El régimen de Israel ha recurrido a cualquier medio a su alcance para detener las conversaciones en curso en Viena (Austria) entre Irán y las potencias mundiales —en las que participa también EE.UU. de manera indirecta—, destinadas a volver a encarrilar el acuerdo nuclear de 2015.

Para lograr su meta, Israel, según indican las pruebas existentes, llevó a cabo el 11 de abril, otro acto de sabotaje en un complejo de enriquecimiento de uranio de la planta nuclear de Natanz (centro de Irán).

Irán tachó de “terrorismo nuclear” y un “crimen de guerra” el incidente de Natanz y prometió vengarse de Israel tanto por ese, como por la muerte de Mohsen Fajrizade, un destacado científico nuclear iraní que fue asesinado en noviembre de 2020 en un ataque terrorista fuera de Teherán.

Conversaciones avanzan bien, pero aún prevalecen algunos desacuerdos

En respuesta a una pregunta sobre a qué punto han llegado las conversaciones en Viena, el vocero del Gobierno persa ha señalado que se ha logrado “un buen progreso” en las pláticas, aunque todavía prevalecen algunos desacuerdos. “Los temas pendientes no significan necesariamente que los diálogos hayan llegado a un punto muerto”, ha agregado.

De igual modo, ha dejado en claro que la República Islámica “no aceptará ningún acuerdo que no sea en pos de los intereses de la nación iraní”, detallando que cualquier convenio debe abarcar, primero, la eliminación de las sanciones unilaterales impuestas por EE.UU. a Teherán.  

 

Hasta la fecha, Irán y los signatarios del acuerdo nuclear —de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés)— han celebrado seis rondas de negociaciones en Viena y casi han llegado a las etapas finales.

Irán subraya que les toca a los otros firmantes del PIAC tomar decisiones difíciles, pues, por su parte, ya lo hizo al mantener vivo el pacto tras la salida de EE.UU. del mismo en 2018, pese a los incumplimientos del resto de integrantes.

Es más, Teherán asegura que volverá a revertir las medidas nucleares —las obligaciones que redujo en reacción a las violaciones de EE.UU.—, una vez que Washington elimine los embargos contra la nación iraní.

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