“Siguiendo a Estados Unidos por el camino sin ley de los asesinatos sumarios por control remoto desde el cielo, las RAF han cruzado la línea”, afirmó el lunes la directora para el Reino Unido de la AI, Kate Allen.
Siguiendo a Estados Unidos por el camino sin ley de los asesinatos sumarios por control remoto desde el cielo, las RAF han cruzado la línea”, afirmó el lunes la directora para el Reino Unido de la AI, Kate Allen.
En alusión a la muerte de los ciudadanos británicos Reyaad Khan y Ruhul Amin, como consecuencia de un supuesto bombardeo de las RAF en Siria, efectuado a finales del pasado mes de agosto, y calificado ayer lunes por el premier británico, David Cameron, como un acto de “defensa propia”, Allen recordó que se trata de una noticia “muy alarmante”.
De igual manera, el grupo de estudios Real Instituto Unido de Servicios (RUSI, por sus siglas en inglés) consideró el lunes que ese ataque británico suponía un “cambio importante” para el país.
“La cuestión no es tanta si este hombre era británico, sino que fue atacado en una zona que no está clasificada como teatro de operaciones de guerra para las fuerzas británicas”, explicó el director general del RUSI, Michael Clarke.
Este eventual ataque aéreo del Reino Unido contra el territorio sirio tiene lugar mientras en 2013, el Parlamento británico rechazó la intervención militar del país en el conflicto sirio, de manera que actualmente solo mantiene colaboraciones con la llamada coalición internacional anti-EIIL, liderada por Estados Unidos.
Ayer lunes, Cameron se presentó ante el Parlamento británico y reconoció que fue un avión no tripulado (dron) británico de las RAF que acabó con la vida de tres terroristas en Siria, incluidos los británicos Reyaad Khan y Ruhul Amin, en “un acto de defensa propia”.

“El bombardeo aéreo era el único modo factible de parar de forma eficaz los ataques que estaba planificando y dirigiendo este individuo (Reyaad Khan)”, apuntó Cameron para después alegar que desde el punto de vista del Derecho Internacional, el ataque ha sido “legal”.
“Estábamos ejerciendo el derecho inalienable del Reino Unido a la legítima defensa (…) Había pruebas claras de que este individuo en cuestión estaba planeando y dirigiendo ataques armados contra el Reino Unido”, señaló.
También, destacó la frustración de al menos seis atentados terroristas contra el Reino Unido por los servicios británicos de seguridad en los últimos doce meses.
Desde marzo de 2011, Siria es escenario de sangrientos conflictos armados provocados por mercenarios procedentes de varios países del mundo, que reciben el apoyo de Occidente y sus aliados regionales para derrocar al Gobierno de Bashar al-Asad.
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