El diario local The Guardian afirmó en su edición del jueves que en los últimos años, Londres, como un poder occidental, ha mostrado una clara hostilidad en contra del jefe del Gobierno ruso, Vladimir Putin, y ahora está preocupado por encontrar su posición “gravemente socavada”, aunque las autoridades británicas han anunciado oficialmente que dicha reunión “es bastante normal”.
Refiriéndose a los comentarios de un diplomático británico, experimentado en trabajar con los presidentes estadounidenses, el rotativo hizo eco también de las preocupaciones del mencionado político por surgir una brecha en los lazos transatlánticos del país europeo.
Recordó que la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, aprovechó su influencia para convencer a la Unión Europea (UE) que conserven las sanciones contra Moscú por la anexión de Crimea a la Federación Rusa en 2014.
El canciller británico, Boris Johnson, censuró el miércoles en Copenhague, la capital de Dinamarca, la “conducta violenta de Rusia” hacia Ucrania y su “incesante campaña de desinformación”.
Pero el temor es que la cumbre Trump-Putin se haga eco de su cumbre con el líder norcoreano Kim Jong-un. ¿Hará Trump un gesto impulsivo que pille por sorpresa a Europa, o será impaciente en las reuniones de la OTAN (11 y 12 de julio), tal y como lo hizo en la reunión del G7 antes de su encuentro bilateral con Kim?”, se preguntó el diario británico The Guardian cuestionando resultados de la cumbre de los presidente de Rusia y EE.UU.
La Inteligencia británica, formal e informalmente, también ha desenterrado detalles sobre cómo Rusia ha intentado interferir en las elecciones en los países occidentales, incluidas las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos, apostilló el periódico británico.
De este modo, aludió a 800 fuerzas militares que el país insolar ha desplegado en Estonia en el marco de las estrategias de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para contrarrestar lo que llaman la amenaza rusa en Europa.
“Pero el temor es que la cumbre Trump-Putin se haga eco de su cumbre con el líder norcoreano Kim Jong-un. ¿Hará Trump un gesto impulsivo que pille por sorpresa a Europa, o será impaciente en las reuniones de la OTAN (11 y 12 de julio), tal y como lo hizo en la reunión del G7 antes de su encuentro bilateral con Kim?”, se preguntó The Guardian.
Moscú y Londres viven momentos de gran tensión desde que, el pasado 16 de marzo, el Gobierno británico acusara a Rusia de estar detrás del ataque contra el exespía ruso Serguei Skripal y su hija, que al parecer fueron envenenados con un agente nervioso en un centro comercial, incidente con el que Moscú rechaza haber tenido algo que ver.
msm/ktg/hnb