• El Secretario de Defensa de EE.UU., James Mattis (centro), y sus pares de Japón y Corea del Sur, Singapur, 19 de octubre de 2018. (Foto: AFP)
Publicada: sábado, 20 de octubre de 2018 6:33

El jefe del Pentágono pide una mayor cooperación entre Estados Unidos, Japón y Corea del Sur para hacer frente a la militarización china de mar disputado.

“No podemos aceptar la militarización de la República Popular China en el mar de la China Meridional ni ninguna coerción en esta región”, dijo el viernes el secretario del Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono), James Mattis, durante una reunión con los ministros de Defensa de Japón y Corea del Sur en Singapur.

Mattis declaró que el Ejército de Estados Unidos, junto con sus aliados asiáticos continuará con sus vuelos, navegaciones y operaciones en los lugares donde “el derecho internacional lo permita” y “los intereses nacionales lo exijan”.

El jefe del Pentágono subrayó que Washington y sus socios en la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean, por sus siglas en inglés) trabajan para que “ninguna nación pueda reescribir” las reglas internacionales y “esperar que todas las naciones grandes y pequeñas respeten esas reglas”.

No podemos aceptar la militarización de la República Popular China en el mar de la China Meridional ni ninguna coerción en esta región”, declara el secretario del Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono), James Mattis.

 

Las declaraciones de Mattis se producen en momentos en que según el anuncio del ministro de Defensa de Singapur, Ng Eng Hen, Pekín planea realizar su primer ejercicio marítimo conjunto con 10 Estados del sur de Asia en medio de tensiones crecientes en el mar de la China Meridional.

El Gobierno de Pekín reclama la soberanía sobre casi un 90 % del mar del Sur de China, donde también hay reclamaciones territoriales de Vietnam, Taiwán, Brunéi, Malasia y Filipinas.

La región ha sido escenario de incesantes tensiones entre el gigante asiático y EE.UU. en los últimos años. Washington ha enviado varias veces aviones y buques de guerra a las proximidades de los islotes controlados por Pekín, so pretexto de defender “la libertad de navegación”.

Por su parte, China acusa a EE.UU. de interferir en los asuntos regionales y agitar deliberadamente las tensiones y ve una “provocación” la presencia de Washington en las aguas de su entorno, así como en las llamadas operaciones de “libertad de navegación” del país norteamericano.

snz/ktg/fmk/hnb