“El oeste de Asia corre el riesgo de ver formarse un terrorismo químico organizado en la región”, ha avisado este viernes el ministro de Defensa de Irán, el general de brigada Amir Hatami, en un evento con motivo del 31. º aniversario del bombardeo químico de Sardasht (ciudad del noroeste de Irán) por parte del régimen entonces vigente en Irak.
Hatami ha dado la voz de alarma en concreto por el desarrollo de armas químicas por parte de Estados Unidos y el régimen israelí, que “ha creado más inseguridad en el oeste de Asia” y ha causado más preocupación por la posibilidad de que bandas terroristas, en concreto EIIL (Daesh, en árabe), accedan a ese tipo de armamento.
En el caso de EE.UU., el alto mando persa ha señalado que ha “incumplido su compromiso” de destruir su arsenal químico y ha aludido, en contraste con ese incumplimiento, al gran ataque lanzado por Washington contra Siria con el pretexto del uso de armas químicas por parte del Gobierno sirio.
El oeste de Asia corre el riesgo de ver formarse un terrorismo químico organizado en la región”, alerta el ministro de Defensa de Irán, el general de brigada Amir Hatami.
“Ese incidente causará sin duda nuevas amenazas y desafíos graves para el futuro de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ)”, ha advertido Hatami tras arremeter contra Washington por infringir las reglas del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) y de la OPAQ con su ataque a Siria.
Volviendo al ataque a Sardsht, tema principal de sus declaraciones, el general de brigada iraní ha recordado la complicidad de EE.UU., que por más que “diga defender los derechos humanos” obstaculizó los esfuerzos de la mayoría de los países miembros del CSNU por condenar el uso de armas químicas por el Gobierno iraquí de la época.
Del mismo modo, Hatami ha indicado que la “enorme reserva de armas químicas, biológicas y nucleares prohibidas” del régimen israelí “amenaza la paz y la seguridad internacionales”.
En la misma línea, el ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, acusó ayer jueves a Washington y el régimen de Tel Aviv de impedir que Oriente Medio quede libre de armas de destrucción masiva y reclamó a la comunidad internacional que actúe para eliminar los arsenales nucleares, químicos y biológicos israelíes.
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