• El jefe del estado mayor del ejército israelí, Eyal Zamir (drcha.) y el ministro israelí de asuntos militares, Israel Katz (izqda.).
Publicada: jueves, 27 de noviembre de 2025 3:10

Un medio de comunicación sionista informa que las diferencias se han intensificado en los niveles más altos de la dirección militar y de seguridad del régimen.

El jefe del estado mayor del ejército israelí, Eyal Zamir, generó una fuerte controversia tras un discurso en la ceremonia en honor a David Ben-Gurión. Según el canal israelí i24, sus declaraciones fueron interpretadas como una crítica directa al ministro de asuntos militares, Israel Katz, y al liderazgo político del país.

Durante su intervención, Zamir pidió “una dirigencia valiente que acepte el fracaso y asuma la responsabilidad del cambio” y subrayó que “la esencia del liderazgo es la reconstrucción”. Asimismo, añadió que se necesita “un liderazgo que no tema ni se hunda, sino que sea inspirador, que vea la verdad y marque un nuevo rumbo”.

La oficina de Katz respondió con firmeza. Fuentes cercanas al ministro afirmaron que Zamir había cruzado “líneas rojas” y que sus palabras socavaban la autoridad política. También lo acusaron de no entregar resultados de investigaciones internas e, incluso, de haber ocultado información, aunque descartaron su destitución.

La tensión se originó cuando Katz ordenó una revisión completa del informe de la comisión Torjeman, elaborado durante siete meses. A este respecto, Zamir replicó con un comunicado crítico, afirmando que “resulta sorprendente poner en duda un informe elaborado por doce generales y presentado personalmente al ministro”, y reprochó a la dirigencia política su rechazo a cualquier investigación externa.

 

Igualmente, criticó a los dirigentes políticos israelíes por no aceptar ningún tipo de investigación y agregó que “el ejército es la única institución que ha investigado profundamente sus fallos”.

El debate se produce en el contexto del ataque del 7 de octubre de 2023 y la operación Tormenta de Al-Aqsa, lanzada por el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) en represalia por los abusos contra los gazatíes y sus santidades.

Los funcionarios israelíes reconocen que los acontecimientos del 7 de octubre de 2023 fueron el mayor fracaso militar y de inteligencia del régimen en las últimas décadas y han dañado gravemente la reputación de Tel Aviv y del ejército israelí a nivel mundial.

zbg/ncl