Fuentes israelíes han informado de que se ha cerrado el espacio aéreo sobre la frontera entre los territorios ocupados y Siria, sobre los altos de Golán al este del río Jordán, y en el noreste del territorio palestino.
La madrugada de este lunes un ataque con misiles, que varios medios han atribuido a Israel, golpeó las bases militares sirias en las provincias de Hama (centro) y Alepo (norte), dejando un número de muertos y heridos.
Según medios israelíes, la decisión de las autoridades del régimen de ocupación de cerrar el espacio aéreo se ha producido en reacción a la amenaza de ataques de represalia.
Paralelamente, el gabinete de seguridad israelí ha sido convocado en una sesión de emergencia en el cuartel general del ejército (la Kirya) en Tel Aviv. Los ministros han acudido por la mañana a la base militar, que también es la sede del ministerio israelí de asuntos militares, para convenir sobre “el aumento de la tensión en la frontera norte”.
Nadie se ha atribuido la autoría del ataque contra Siria de esta madrugada, el régimen de Tel Aviv no se ha pronunciado oficialmente al respecto. Sin embargo, algunos analistas y expertos de los propios medios locales consideran a Israel responsable.
Tal es el caso del general retirado israelí Amos Yadlin, director del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional (INSS, por sus siglas en inglés), quien ha sugerido, incluso, que podría tratarse de EE.UU.
“Por la envergadura y la puntería parece tratarse de la acción de un ejército organizado. En cuyo caso solo podría ser Estados Unidos, redundando en el ataque que llevó a cabo hace dos semanas”, ha indicado Yadlin.
Las autoridades del régimen han anunciado en reiteradas ocasiones que tienen ‘total libertad de acción’ en el territorio sirio y que seguirán atacando Siria, sin aceptar restricción alguna a sus agresiones.
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