El ejército israelí ha informado este miércoles de que el oficial anónimo, cuyo rango no fue revelado, fue declarado culpable, el pasado domingo, en un tribunal militar, de cometer delitos sexuales, acoso sexual, soborno, fraude, incumplimiento de confianza y de exceder su autoridad, hasta el punto de representar un riesgo para la seguridad nacional.
Según el ejército israelí, el oficial estuvo bajo arresto desde el inicio de los procesos penales en su contra. A este respecto, el diario Haaretz informó que fue acusado a comienzos de 2016.
El ejército se ha negado a revelar si el acusado ya había sido condenado o cualquier detalle sobre su pena.
Estos hechos se produjeron dos días después de que otro militar israelí, el general de brigada Ofek Buchris, admitiera haber tenido una conducta sexual inapropiada con las mujeres soldado bajo su mando durante el tiempo que estuvo al frente de la brigada golani (una brigada de infantería israelí).
Buchris, que admitió los cargos después de meses de negarlos de manera vehemente, recibió una sentencia de suspensión y fue degradado al rango de coronel.
Conductas inapropiadas desde el punto de vista ético y moral y los crímenes sexuales han experimentado un aumento significativo en los últimos años entre los militares israelíes, manchando enormemente la imagen del sector militar de este régimen.
Un estudio realizado por el parlamento israelí y publicado en febrero de 2014 indica que una de cada ocho mujeres incorporadas al ejército israelí sufrió algún tipo de agresión sexual en 2013. Una soldado israelí identificada como May Fatal rompió su silencio en abril de 2015 y denunció haber sufrido abusos sexuales por parte de Liran Hajbi, excomandante de las brigadas Givati del ejército israelí.
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