Una mujer puede realizar el ataque suicida solo cuando lo permita el líder del EIIL, Ibrahim al-Samarrai, según el documento.
La noticia se hizo pública recientemente después de que el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) publicara un certificado de matrimonio, que concede a la mujer el derecho de llevar a cabo una operación suicida incluso sin el visto bueno de su esposo.
De acuerdo con el documento, una mujer puede realizar el ataque suicida solo cuando lo permita el líder del EIIL, Ibrahim al-Samarrai, alias Abu Bakr al-Bagdadi.

Se trata de un frustrado intento del grupo takfirí Daesh para crear brigadas de mujeres para llevar a cabo ataques con bombas, luego de que la agrupación sufriera fuertes bajas en sus recientes batallas con los Ejércitos de Irak y Siria, opinan activistas y grupos de estudios antiterroristas.
Activistas y grupos de estudios antiterroristas, sorprendidos por esta noticia, opinan que se trata de un frustrado intento del grupo takfirí Daesh para crear brigadas de mujeres para llevar a cabo ataques con bombas, luego de que la agrupación sufriera fuertes bajas en sus recientes batallas con los Ejércitos de Irak y Siria.
El grupo takfirí EIIL publicó últimamente un terrible manual para someter a las mujeres. Según el texto, las niñas podrían contraer matrimonio a los 9 años, las "más puras" deberán estar casadas para los 16 o 17 y todas las mujeres deben considerar a la maternidad como el propósito de su existencia, según la Fundación Quilliam, un grupo de estudios antiterroristas con sede en el Reino Unido.
El manifiesto indica que la educación de una niña termina a los 15 años. Dice que una mujer debería quedarse en casa y solo podría dejar su casa si fuera a estudiar teología, si es doctora o educadora y si debe luchar junto a miembros del EIIL.
El EIIL, con miles de integrantes regionales, europeos y norteamericanos, declaró en junio de 2014 la instauración de su llamado califato en algunas zonas de las que se apoderó en Irak y Siria, donde está cometiendo diversos crímenes de lesa humanidad, entre ellos ejecuciones sumarias y secuestros masivos.

Durante los primeros meses de su avance en Irak y Siria, el grupo takfirí secuestró a miles de mujeres y niñas, a las que violó, torturó y vendió como esclavas sexuales.
De acuerdo con informes, sólo en la localidad de Sinyar, en el oeste de Mosul, norte de Irak, Daesh vendió en agosto de 2014 más de 5000 mujeres y niñas izadíes en el “mercado de esclavos”.
ftm/ktg/nal