“Arabia Saudí ha perdido una batalla diplomática, política y mediática contra Irán”, afirmó el analista internacional Basem Tajeldine en una entrevista concedida el martes a HispanTV.
Arabia Saudí, con sus acusaciones a Irán en el caso Aramco, pretendía desviar la atención pública sobre el crimen que Riad y sus aliados están cometiendo en Yemen y buscar la fórmula y las formas de que EE.UU. intervenga y agreda directamente a Irán, subrayó el analista.
Tajeldine hizo estas declaraciones después de que el martes el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, negara que hayan encontrado pruebas que confirmen las afirmaciones de EE.UU. sobre que Irán está involucrado en el ataque contra la compañía saudí Aramco.
El pasado 14 de septiembre, las instalaciones de Aramco en Abqaiq y Jurais, en el este de la península Arábiga, fueron atacadas por 10 drones. El movimiento popular yemení Ansarolá reivindicó el ataque y explicó que se trata de un ataque de represalia a los crímenes saudíes cometidos contra el pueblo de Yemen.
Sin embargo, Riad y Washington acusaron a Irán de este ataque, acusaciones que fueron rechazadas por Teherán. Incluso, varios países del mundo, entre ellos Rusia y Japón, han calificado de infundadas las acusaciones antiraníes de EE.UU., e insisten en que no hay pruebas sobre la implicación de Teherán en dicho ataque con drones.
LEER MÁS: Rusia: no se puede culpar a Irán del ataque a la saudí Aramco
En otra parte de sus declaraciones y sobre la influencia de Irán y Arabia Saudí en el mundo, Basem Tajeldine afirmó que hay una oposición mundial a Arabia Saudí por su rol de apoyar a los grupos terroristas, y un reconocimiento mundial a Irán por su posición en la lucha contra los grupos terroristas en el mundo.
mkh/ktg/msf