• El portavoz del Ejército yemení, Yahya Sari.
Publicada: sábado, 29 de junio de 2019 20:42
Actualizada: sábado, 29 de junio de 2019 23:04

Aviones no tripulados (drones) yemeníes han atacado este sábado varias instalaciones militares de Arabia Saudí en los aeropuertos de Jizan y Abha.

Las fuerzas yemeníes han bombardeado este sábado por la noche varias áreas del aeropuerto de Jizan, entre ellas el estacionamiento de aviones de combate, ha reportado la televisión estatal yemení, Al Masirah. Además de Jizan, los drones han atacado el aeropuerto internacional de Abha, ubicado en el sureste de Arabia Saudí.

El portavoz del Ejército yemení, Yahya Sari, ha declarado que los ataques de los aparatos teledirigidos se han llevado a cabo con una gran precisión y han provocado la interrupción de la navegación aérea en el aeropuerto.

“Nuestras fuerzas continuarán atacando todos los sitios e instalaciones militares del enemigo, incluidos los aeropuertos utilizados con fines militares, como el despegue de aviones de combate y helicópteros que se utilizan para bombardear a Yemen. Son objetivos legítimos de nuestras fuerzas”, ha manifestado el vocero castrense.

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Nuestras fuerzas continuarán atacando todos los sitios e instalaciones militares del enemigo, incluidos los aeropuertos utilizados con fines militares, como el despegue de aviones de combate y helicópteros que se utilizan para bombardear a Yemen. Son objetivos legítimos de nuestras fuerzas”, ha manifestado el portavoz del Ejército yemení, Yahya Sari.

 

Este y otros ataques yemeníes contra objetivos saudíes dentro del reino árabe se enmarcan en la advertencia de las fuerzas yemeníes de que vengarán, con “una respuesta contundente”, los crímenes de los saudíes y sus aliados contra la población civil del país más pobre del mundo árabe. 

La campaña de bombardeos saudíes, iniciada en 2015, ha causado más de 91 000 muertos en Yemen. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calcula que, si la guerra no se detiene, la cifra de víctimas mortales podría llegar a 500 000 en 2020.

Las fuerzas del Ejército yemení, apoyadas por el movimiento popular Ansarolá, lanzan a menudo ataques de represalia contra posiciones vitales y militares de Arabia Saudí y han advertido de “grandes sorpresas” en el futuro próximo si la monarquía saudí y sus aliados no acaban con los bombardeos y el bloqueo aéreo y naval contra Yemen.

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