Los rescatistas, en el superficie del mar, buscan rastros de pasajeros desaparecidos, mientras que los buzos, bajo el agua, peinan los restos del avión siniestrado.
Las autoridades creen que ya tienen localizado el avión. Los buzos han sido desplegados para tratar de confirmar si la señal corresponde a una de las cajas negras.
Iban 189 personas a bordo del vuelo JT610, de la aerolínea Lion Air, cuando la torre de control perdió la señal con el Boeing 737, 13 minutos después de que despegó del aeropuerto de Yakarta, con destino a Pangkal Pinang, en la isla de Bangka. Las autoridades confirmaron la identidad de una de las víctimas; a saber, una mujer de 24 años.
Para las familias de pasajeros desaparecidos, a medida que pasa el tiempo, las noticias son más desalentadoras. Cientos llegaron a un puerto en el norte de Yakarta para identificar las pertenencias de sus seres queridos, aunque muchos todavía tienen esperanza.
Las autoridades indonesias dicen que el piloto, antes de perder contacto, pidió permiso para regresar a la base. Cabe mencionar que el avión había sufrido problemas técnicos un día antes del accidente. Pero, el director ejecutivo de la aerolínea dice que el fallo fue eliminado y que la aeronave obtuvo el permiso para el siguiente despegue.
La aerolínea Lion Air tiene vuelos muy baratos pero con un mal historial de seguridad. En los últimos años, se han realizado muchas discusiones sobre el cumplimiento de principios de seguridad por parte de dicha línea.
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