Un incendio desencadenado la noche del sábado durante un enfrentamiento entre un grupo de libaneses y una familia de refugiados sirios asoló por completo un campamento para sirios desplazados en la ciudad libanesa de Minieh, en el distrito de Akkar, noreste de El Líbano, informan medios locales.
El incendio provocó enormes daños materiales, dejando tres heridos y, conforme al responsable de prensa del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en el norte de El Líbano, Jaled Kabbara, unas 80 tiendas donde habitaban unas 76 familias, es decir, un total de 370 personas, fueron devoradas por las llamas “hasta los cimientos, con todas sus pertenencias personales”.
A este respecto, el Ministerio de Exteriores y Expatriados de Siria, mediante un comunicado emitido esta misma jornada, ha afirmado que “la República Árabe Siria lamenta el incendio que asoló el campamento de refugiados sirios en Bebnin/El Líbano, pues aterrorizó a sus residentes y privó a varios de ellos de refugio”, según recoge la agencia oficial siria de noticias, SANA.
#SyrianRefugees camp in northern #Lebanon burned down by some locals who earlier that day had confrontations with some refugees.
— Syrian Association for Citizen’s Dignity (@SyrianACD) December 27, 2020
At least 75 Syrian families fled the camp, once again living the horrors of displacement.https://t.co/NmvZUzyGIz
La Cartera siria también ha exigido en su nota a la justicia y a las autoridades libanesas pertinentes, que acepten sus responsabilidades a la hora de gestionar esta situación, y que garanticen la protección y el bienestar de los sirios desplazados.
Asimismo, en otra parte del texto, la Cancillería siria reitera su llamamiento a los ciudadanos sirios, quienes se vieron obligados a abandonar su país debido a la “guerra injusta”, a “regresar a su tierra natal” y, en este sentido, asegura que el Gobierno de Damasco está haciendo todo lo que está en su mano para facilitar su regreso.
Por su parte, en una entrevista televisada concedida este mismo domingo, el gobernador de Trípoli (norte de El Líbano), Ramzi Nohra, ha condenado enérgicamente el incidente, señalando que el campamento en cuestión está bajo la vigilancia periódica del Ejército libanés y organismos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El conflicto en Siria, que comenzó en 2011 y aún continúa, ha devastado el país, del que han huido 6,6 millones de sirios, de acuerdo con los datos proporcionados por el ACNUR.
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