Medios locales han informado este sábado que las fuerzas de seguridad rusas ingresaron a la sede del grupo paramilitar Wagner en San Petersburgo, en el oeste del país euroasiático, lo que indica que ha empezado una operación de búsqueda de los golpistas.
Conforme a la agencia rusa de noticias TASS, dos autobuses que transportaban fuerzas contrainsurgentes rusas se han estacionado cerca del edificio donde se encuentran las milicias de Wagner y se preparan para comenzar operaciones militares contra este grupo.
Otros medios rusos han difundido vídeos que muestran a las milicias de Wagner moviéndose libremente por la ciudad sin ninguna objeción por parte de las fuerzas de seguridad.
El jefe del grupo paramilitar Wagner, Yevgueni Prigozhin, anunció un levantamiento armado contra el mando militar ruso después de acusar al Ejército del gigante euroasiático de matar a un “gran número” de sus miembros activos en un bombardeo de las posiciones de la compañía militar privada.
En este sentido, Prigozhin ha anunciado este sábado en un mensaje en su canal de Telegram que su ejército privado ya ha cruzado la frontera rusa y está entrando en la región de Rostov, en el sur del país.
Ante las acusaciones de Prigozhin, el Servicio Federal de Seguridad de la Federación de Rusia, (FSB, por sus siglas en ruso) hizo un llamado a los militares del grupo Wagner a “no cometer un error irreparable” y no cumplir las órdenes de Prigozhin, así como a “tomar medidas para su detención”. Según la entidad, las declaraciones y acciones del líder paramilitar son, de hecho, una llamada al inicio de un conflicto civil armado en territorio de Rusia.
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