El representante permanente de Rusia ante las organizaciones internacionales radicadas en Viena (capital de Austria), Mijaíl Uliánov, en un mensaje publicado el sábado en la red social Twitter, destacó que “La posición de principios de la parte rusa es que todos los problemas de implementación de JCPOA deben resolverse en el marco de la Comisión Conjunta”.
A continuación, el diplomático ruso instó a las partes restantes del acuerdo nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), “para que no pierdan estas pautas”.
Uliánov dice “partes restantes”, puesto que, en mayo de 2018, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, retiró unilateralmente a su país del PIAC para poder reimponer las sanciones contra Irán que se habían levantado en virtud de este pacto, que inicialmente suscribieron en 2015 Irán y el Grupo 5+1 (integrado entonces por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Los comentarios del diplomático ruso aluden a la resolución antiraní que presentó el llamado E3 (Alemania, Francia y el Reino Unido) ante la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) en la que pretextan la falta de cooperaciones del país persa con esta entidad. La Junta de Gobernadores de la Agencia aprobó dicha resolución e Irán tachó de inaceptable la medida.
De hecho, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán envió el jueves una carta a Josep Borrell, jefe de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), en la que denuncia el incumplimiento de la troika europea con el acuerdo nuclear y condena su injerencia en las cooperaciones con la AIEA. Asimismo, enumera las seis veces que Irán se refirió a la Comisión Conjunta del PIAC para denunciar el incumplimiento tanto de EE.UU. como de los países europeos con sus compromisos en el pacto nuclear.
Teherán critica a Europa por no cumplir su promesa de resarcir los daños causados por la salida de EE.UU. del pacto y aseguran que la iniciativa antiraní del E3 en la AIEA está basada en reclamos del régimen de Israel y la presión de Washington que, a pesar de haberse retirado del pacto nuclear, busca destruirlo e intensificar su campaña de presiones contra el país persa.
ncl/lvs/msf