Vladimir Putin destacó que esta medida ha ayudado a disminuir la tensión y ha preservado la seguridad de los civiles sirios.
Putin pronosticó que no habrá operaciones militares en Idlib, Siria, en el futuro próximo.
Sin embargo, en una conferencia con el canciller austriaco, Sebastián Kurz, recordó lo precaria que está la situación en Idlib, por ser el último bastión de los grupos extremistas en Siria.
El presidente ruso precisó que el último objetivo de su país no es guerra, sino garantizar la paz y seguridad, tanto para los civiles sirios como para los militares rusos. Destacó que la zona desmilitarizada en torno a Idlib, sirve para este objetivo en Siria.
Putin, ayer, durante el foro de Energía de Rusia, indicó que la presencia de las fuerzas estadounidenses en Siria, viola la carta de las Naciones Unidas. De igual modo, abogó por la salida de todas las tropas extranjeras en Siria.
Desde el fin de septiembre y en el marco del acuerdo entre Rusia y Turquía, algunos grupos armados comenzaron a abandonar la ciudad de Idlib, en el nor-oeste de Siria, cerca de las fronteras con Turquía.
Pese a violaciones al acuerdo en la zona desmilitarizada, la situación está relativamente calmada.
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