• El portavoz de la Cancillería de Irán, Said Jatibzade, habla durante una rueda de prensa en Teherán, capital, 20 de septiembre de 2020. (Foto: Fars)
Publicada: jueves, 8 de julio de 2021 2:21

En rechazo a la retórica de la troika europea, Irán asegura que su decisión de producir combustible de siliciuro de uranio no viola sus compromisos con la AIEA.

El portavoz de la Cancillería de Irán, Said Jatibzade, rechazó el miércoles la preocupación expresada por el Reino Unido, Alemania y Francia sobre su decisión de producir su primera placa de combustible de siliciuro, usando uranio enriquecido al 20 %.

“Contrariamente a las afirmaciones de EE.UU. y las potencias europeas, este producto tiene usos pacíficos, medicinales y humanitarios, y su producción no contradice las obligaciones de no proliferación y salvaguardias de Irán bajo el acuerdo de 2015”, afirmó el diplomático iraní.

Jatibzade recalcó que la medida de Irán tiene únicamente fines pacíficos y es para su uso en el reactor de investigación de Teherán, por lo que no constituye, de ningún modo, una violación de los compromisos de Irán con la Agencia Internacional de Energía Atómica (​AIEA) y con el acuerdo nuclear firmado en 2015, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés).

El funcionario iraní ha reprochado a estos países europeos el que acusen a Irán de violar el convenio nuclear mientras que ellos mismos nunca han cumplido, en la práctica, sus obligaciones bajo dicho acuerdo y, en consonancia, ante las crueles presiones de EE.UU., aplican las sanciones extraterritoriales e ilegales de este último contra Irán.

 

A continuación, ha recalcado que “Teherán está preparado para revertir sus medidas compensatorias cuando se levanten las inhumanas sanciones”.

Después de la salida ilegal de EE.UU. del pacto nuclear en 2018 y la reimposición de las sanciones, Irán esperó un año, dando una oportunidad al resto de firmantes del acuerdo —el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania— para salvarlo. No obstante, ante la pasividad de la troika europea, empezó a reducir gradualmente sus compromisos estipulados en el mismo.

En este sentido, a principios de enero, Irán comenzó a inyectar gas en las centrifugadoras de la planta nuclear de Fordo (centro), con lo que volvió a enriquecer uranio al 20 %, y aseguró que tiene la capacidad para enriquecer fácilmente uranio bajo cualquier porcentaje, incluso por encima del 40, 60 y 90 %.

En medio de las conversaciones en Viena (Austria) para reactivar el acuerdo nuclear, Teherán ha enfatizado en varias ocasiones que, si EE.UU. levanta absolutamente todas las sanciones, volverá a revertir los pasos correctivos en el pacto de 2015.

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