EE.UU., bajo la Administración de Donald Trump, da un nuevo paso hostil contra el pueblo palestino. Por un lado, busca desconocer su derecho al retorno, y por otro, presiona a los palestinos con el recorte de más de 200 millones de dólares de ayuda económica. Los palestinos condenan estas políticas racistas de Washington y las califican de chantaje político.
El informe también indica que la Administración de Trump, busca reconocer solo a medio millón de palestinos como desplazados, lo que difiere radicalmente de las estadísticas de la Organizaciones de las Naciones Unidas (ONU), que hablan de cinco millones de expatriados.
Por su parte, las autoridades palestinas denunciaron las políticas hostiles de Washington y las calificaron de lamentable chantaje.
Asimismo, afirmaron que el pueblo palestino no se dejará intimidar y no cederá ante las presiones injustas de EE.UU.
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