En las imágenes grabadas el domingo por una cámara de vigilancia se ve cómo dos militares israelíes de civil piden la documentación a un palestino que está dejando la basura fuera del supermercado donde trabajaba.
Cuando el joven dice que sus documentos están dentro de la tienda, los militares comienzan a darle violentos puñetazos y golpes y más golpes. En la golpiza hay implicados al menos dos efectivos policiales, e ¡inimaginable!, algunos colonos israelíes que pasaban por el lugar se unen a la paliza que sin motivo están propinando al palestino, según el video.
Uno de los testigos, citado por la agencia palestina de noticias Maan, escribió en su Facebook que los golpes “asesinos” rompieron los dientes del palestino. “Destrozaron al árabe”, comunicó.
El portavoz de la policía del régimen israelí, Micky Rosenfeld, tras ratificar la veracidad de los hechos, declaró también el domingo a Maan que no sabía si los soldados se habían identificado correctamente a sí mismos cuando hablaban con el palestino en cuestión.
No obstante, Rosenfeld, citado por los medios israelíes, aseguró que el palestino atacó primero a los militares israelíes y ellos se vieron “obligados” a emplear la fuerza para detener al “sospechoso”.
El funcionario israelí adujo que los soldados israelíes tuvieron que ser trasladados a un hospital por los “moratones” y las señales de “mordiscos” que tenían en el cuerpo. Pero, respecto al palestino brutalmente golpeado, Rosenfeld comenta que no sabe a ciencia cierta si recibió atención médica.
Hannah Arendt acuñó el término la "banalización del mal" para interpretar cómo "un ser mediocre y oscuro como Eichmann pudo servir de burócrata eficiente para organizar la masacre cometida en la Segunda Guerra Mundial", pero la divulgación de constantes imágenes —captadas por cámaras de vigilancia en los territorios ocupados palestinos— sobre israelíes normales y corrientes: colonos y soldados, golpeando, disparando e incluso matando a ciudadanos palestinos, son buenos ejemplos: en este caso, sin embargo, de abusos contra los palestinos.
Un video divulgado en marzo mostraba cómo un soldado israelí disparaba en la cabeza a un palestino que estaba tumbado inmóvil en el suelo en la ciudad de Al-Jalil (Hebrón), en la ocupada Cisjordania.
Según un informe de la asociación nacional de familiares de mártires palestinos emitido en marzo, desde el inicio de la Tercera Intifada a principios de octubre de 2015, los soldados del régimen israelí han matado a 200 palestinos.
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