Las autoridades de Buenos Aires (capital argentina) han decidido clausurar el estadio Monumental tras los incidentes ocurridos el sábado en la previa a la final de la Copa Libertadores de América, informaron el domingo fuentes locales.
“El Monumental excedió la capacidad de personas permitidas”, ha declarado el titular de la Agencia Gubernamental de Control, Ricardo Pedace, que ha explicado que la medida se trata de una “clausura administrativa”.
El sábado, el autobús que llevaba a los jugadores del Xeneize fue apedreado antes de ingresar al estadio y varios de los futbolistas terminaron afectados por el gas pimienta que lanzó la policía para tratar de dispersar a los vándalos.
El Monumental excedió la capacidad de personas permitidas”, declara el titular de la Agencia Gubernamental de Control, Ricardo Pedace, en alusión al estadio donde iba a jugarse el partido entre River Plate y Boca Juniors.
Por su parte, el presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Alejandro Domínguez, ha explicado que la suspensión del partido definitorio del campeón de Sudamérica se debe a que “los equipos no están en igualdad de condiciones”.
Boca Juniors y River Plate empataron 2-2 en el primer partido, de dos, por la final. El encuentro se jugó en el estadio La Bombonera, con Boca de local y solo con seguidores de este equipo en las tribunas.
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