Medios locales informan que han sonado las alarmas de ataque en la embajada estadounidense, así como en la base Unión III que aloja tropas de la llamada coalición internacional que lidera Estados Unidos.
Algunas fuentes han informado que al parecer el sistema de defensa antiaérea de Estados Unidos ha podido repeler el ataque.
Hasta el momento ningún grupo ha reivindicado la autoría del ataque.
La Zona Verde es un islote con la seguridad de un búnker creado tras la invasión de Irak en 2003 por el Ejército estadounidense.
Esta zona ha sido blanco de varios ataques con cohetes, sobre todo después de que Washington asesinara, el 3 de enero, al comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el teniente general Qasem Soleimani, y al subcomandante de las Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe), Abu Mahdi al-Muhandis, en un ataque aéreo en Bagdad.
Tras este ataque estadounidense, catalogado por Bagdad como una violación flagrante a la soberanía y la integridad de Irak, el Parlamento iraquí aprobó una resolución para poner fin a la presencia de las fuerzas estadounidenses en su suelo.
Tanto el Gobierno como la nación iraquí exigen poner fin a la presencia de extranjeros en Irak, especialmente tras la derrota del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), afirman que el Ejército iraquí y Al-Hashad Al-Shaabi, son capaces de luchar contra los terroristas, por lo que no es necesaria la presencia de las tropas de la coalición liderada por Estados Unidos.
No obstante, EE.UU. se niega a abandonar el país árabe con grandes cantidades de recursos naturales, ya que en las últimas décadas ha puesto su mirada en los ricos yacimientos petroleros de este país y reconoce abiertamente que quiere mantener sus tropas en Irak para controlar el petróleo tal y como lo ha hecho con Siria.
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