“Daesh (acrónimo en árabe del EIIL) ha retornado a Al-Hegeen, en Siria, que está a 40 kilómetros de Qaim, al oeste de Al-Anbar, en el centro del califato. A día de hoy, allí se hallan decenas de líderes iraquíes, sirios y de otras (nacionalidades) de Daesh”, ha dicho este miércoles Farhan Muhamad al-Duleimi, miembro del consejo de la provincia occidental de Al-Anbar, citado por el sitio web Iraqi News.
La fuente ha agregado que es probable que también el líder del EIIL se encuentre en la zona, por lo que, ha añadido, los líderes iraquíes de seguridad pidieron atacar esta área, ya que consideran que amenaza la seguridad del oeste de Al-Anbar.
No obstante, el funcionario iraquí ha enfatizado que “salir de ese lugar sin ser blanco de los aviones de la coalición de EE.UU. es cuestionable”, criticando claramente las actuaciones de la coalición anti-Daesh.
Daesh (acrónimo en árabe del EIIL) ha retornado a Al-Hegeen, en Siria, que está a 40 kilómetros de Qaim, al oeste de Al-Anbar, en el centro del califato. A día de hoy, allí se hallan decenas de líderes iraquíes, sirios y de otras (nacionalidades) de Daesh”, ha dicho este miércoles Farhan Muhamad al-Duleimi, miembro del consejo de la provincia iraquí de Al-Anbar.
El 7 de diciembre de 2017, el Ministerio ruso de Defensa informó de la “completa liberación” de Siria del grupo terrorista EIIL. Dos días después, el primer ministro de Irak, Haidar al-Abadi, anunció “el fin de la guerra” contra los takfiríes tras tres años de lucha antiterrorista.
Desde el colapso del autoproclamado califato de Daesh en Siria e Irak, el líder de esta banda terrorista desapareció, dando inicio a una serie de rumores sobre su paradero, su estado de salud o su posible sobrevivencia. Varios informes anuncian su muerte, mientras otros revelan que Al-Bagdadi, de nacionalidad iraquí, está en una de las bases militares de EE.UU. en Siria.
Los últimos remanentes del grupo terrorista continúan lanzando ataques esporádicos en todo Irak contra los efectivos del Ejército iraquí. Los informes de seguridad de Irak indican que el grupo takfirí todavía representa una amenaza para la estabilidad del país árabe.
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