En una entrevista concedida el domingo al portal de la cadena británica BBC, el líder del partido Conservador de Escocia, Douglas Ross, dio un contundente “por supuesto” cuando le preguntaron, si el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, debería renunciar del cargo, en caso de que se demostrara que ha violado el código de conducta ministerial en la financiación de la renovación de su apartamento oficial en Downing Street.
“Creo que la gente espera los más altos estándares de quienes ocupan las más altas funciones del país. Por eso creo que la gente está mirando las investigaciones que están actualmente en curso y esperan las respuestas”, subrayó Ross.
El miércoles, la Comisión Electoral británica anunció que investigará oficialmente el uso de más de 111 000 dólares en la renovación del apartamento oficial de Johnson. Sobre este caso, un exasesor del premier asegura que las obras fueron realizadas con donaciones privadas, aunque Johnson lo rechaza, los debates siguen, incluso en el Parlamento.
La secretaria británica de Asuntos Exteriores en la sombra del Partido Laborista, Lisa Nandy dijo el mismo domingo que estaba claro que Johnson estaba ocultando información al público y calificó de “espantoso” que el primer ministro no se sincere sobre quién le prestó o regaló el dinero, y sobre qué posibles favores o promesas pudo haber dado.
De momento, tres investigaciones están examinando el caso en momentos críticos puesto que están cerca las elecciones regionales y municipales, unos comicios que representan la primera prueba electoral para el Partido Conservador del premier, después de la entrada en vigor del Brexit y los efectos devastadores de la pandemia del coronavirus, causante de la COVID-19.
Aunque las encuestas anteriores sugirieron que las acusaciones sórdidas no estaban afectando significativamente el apoyo público a los conservadores, dos nuevos sondeos señalan un retroceso en el avance de los conservadores ante los laboristas.
Los resultados de un nuevo estudio de opinión, realizado entre el miércoles y el viernes por la consultora Opinium a más de 2000 adultos, mostró que los conservadores (42 %) cayeron a una ventaja de cinco puntos sobre los laboristas (37 %), lo cual colocó a los conservadores dos puntos abajo y al laborismo cuatro puntos más en comparación con la semana anterior.
El líder conservador británico ha sido objeto de duras críticas desde el inicio de la pandemia, hace más de un año, acusado primero de tardar en tomar medidas necesarias, y después de malgastar el dinero de los contribuyentes en suministro de equipos de protección sin licitación.
Y, últimamente, de tener contactos directos con importantes empresarios, como James Dyson, al que habría prometido arreglos fiscales a cambio de la fabricación de respiradores para los hospitales del Reino Unido.
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