Publicada: jueves, 11 de enero de 2018 23:43

La premier británica, Theresa May, ha dicho en varias ocasiones que salir de la UE con un mal acuerdo, es peor que salir sin acuerdo alguno, pero desde los sectores comerciales, financieros e industriales se pide desesperadamente que se minimicen las trabas para seguir comerciando con Europa.

Salir de la Unión Europea (UE) sin acuerdo podría costar al Reino Unido medio millón de puestos de trabajo y una pérdida de inversiones de 50 mil millones de libras, o 67 mil millones de dólares, según el último informe encargado por la Alcaldía de Londres.

El informe, elaborado por Cambridge Econometrics sostiene que la capital británica perdería hasta un 2 % para 2030 lo que supondría una década perdida. El alcalde de Londres, Sadiq Jan, pide un estatus especial para la City de Londres para que pueda seguir operando sin tarifas en Europa, pero desde Bruselas se dice que esto es imposible sin la pertenencia al mercado único.

La Comisión Europea (CE) también ha elaborado sus propios informes destacando las consecuencias para sectores clave de la industria británica, como la farmacéutica, el transporte, el judicial o el financiero entre otros, que necesitan de certificados europeos para sus operaciones.

Y es que parece que todos están preparando informes sobre el impacto de los posibles desenlaces excepto el propio Gobierno británico, admitido bajo presión en el Parlamento, por medio del ministro de Brexit, David Davis.

Tras meses de negociaciones y de incertidumbre, la idea de un segundo referéndum sobre si se acepta el acuerdo final sigue tomando fuerza. El último en sumarse a esta petición, precisamente la personas que motivó el Brexit, el exlíder del Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP, poe sus siglas en inglés) Nigel Farage.

Ian Díez, Londres.

xsh/mkh