“David Cameron se encuentra en las bases de datos de la NSA junto con otros [principales figuras públicas del Reino Unido]”, afirmó en una conferencia organizada por la ONG Amnistía Internacional (AI).
David Cameron se encuentra en las bases de datos de la NSA junto con otros, afirmó Edward Snowden.
Además, criticó al Gobierno británico por desempeñar un “papel activo” en la red global de vigilancia creada por la NSA, actuando de manera irresponsable al permitir que la agencia estadounidense instale sus tecnologías de inteligencia en el país europeo.

Según ratificó Snowden, todas estas ayudas que le brinda Londres a la NSA se usan en su contra: “El gobierno británico simplemente confía en la NSA, lo que va en contra suya”, asegura en la conferencia que duró casi 40 minutos.
El extécnico de la NSA manifestó que el Reino Unido teme a su propia población con la idea de que un debate público sería una amenaza para el gobierno, al subrayar que Londres no solo intenta preservar las libertades civiles, sino que está camino a limitarlas.
En otra parte de sus declaraciones, calificó de “ineficaz” todo tipo de espionaje bajo la bandera de la lucha antiterrorista, razón por la cual no solo no se limita a los actos terroristas, sino que permite a los gobiernos entrometerse en la vida privada de sus ciudadanos.
Snowden fue quien reveló el pasado mes de febrero que el Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno británico (GCHQ) en cooperación con NSA robaron los códigos de encriptación de uno de los fabricantes de tarjetas SIM más grandes de mundo, Gemalto; mediante el programa Mobile Handset Exploitation Team, lograron acceder a los datos de todas las tarjetas SIM de más de 450 servicios de telefonía celular de todo el globo.

El 20 de mayo de 2013, Snowden abandonó Estados Unidos y viajó a Hong Kong, desde donde conmocionó al mundo filtrando documentos clasificados sobre programas globales de cibervigilancia a cargo de los servicios secretos de Estados Unidos y el Reino Unido.
Tras esta revelación, Snowden viajó a Moscú donde pasó varias semanas en la zona de tránsito del aeropuerto Sheremétievo hasta que en agosto obtuvo por un año asilo en Rusia. A partir del 1 de agosto de 2014, Rusia prorrogó por tres años más el permiso de residencia a Snowden, lo que le permitía desplazarse libremente por el territorio ruso, viajar al extranjero, e incluso optar a la nacionalidad rusa una vez transcurridos cinco años.
Sin embargo, la Justicia estadounidense imputa a Snowden delitos de espionaje, robo y transferencia no autorizada de propiedad gubernamental. Cada cargo presentado podría costarle al filtrador hasta 10 años de prisión, pero este exanalista de NSA se ha granjeado gran número de simpatizantes que lo consideran un “héroe”.
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