• Presidenta de Argentina, Cristina Fernández
  • Presidenta de Argentina, Cristina Fernández
Publicada: sábado, 21 de febrero de 2015 18:25

La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, ha criticado la marcha del miércoles (18F) convocada por los fiscales opositores y denuncia que los miembros del “partido judicial” organizaron la movilización con el fin de “tener un súper poder por encima de las instituciones surgidas del voto popular”.

“Tanto en lo gestual como en las palabras y en lo ostensiblemente visible, el 18F fue decididamente una marcha opositora, convocada por fiscales y apoyada por jueces y todo el arco político opositor. Simple y sencillamente, una marcha opositora”, acusó Fernández, poniendo en tela de juicio que fuera un homenaje al fallecido fiscal federal Alberto Nisman.

La mandataria se ha pronunciado sobre lo sucedido en las calles de Buenos Aires el miércoles en un detallado análisis publicado este sábado en su página oficial bajo el titulo “18F, el bautismo de fuego del partido judicial”.

 “Tanto en lo gestual como en las palabras y en lo ostensiblemente visible, el 18F fue decididamente una marcha opositora, convocada por fiscales y apoyada por jueces y todo el arco político opositor. Simple y sencillamente, una marcha opositora”, afirmó la Fernández poniendo en tela de juicio el supuesto fin de la convocatoria: el homenaje al fallecido fiscal federal Alberto Nisman.

En el mismo sentido, la jefa de Estado destaca que “el objetivo oculto e implícito de la marcha: El 18F no es el homenaje a un Fiscal, ni siquiera un reclamo insólito de justicia, sino el bautismo de fuego del Partido Judicial”.

A  juicio de Fernández, ahora la oposición no asesta “golpes violentos que interrumpen el funcionamiento de las instituciones y de la Constitución”, sino que usa otros instrumentos más sofisticados: “Articula con los Poderes económicos concentrados y fundamentalmente con el aparato mediático monopólico, intentando desestabilizar al Poder Ejecutivo y desconociendo las decisiones del Legislativo”.

Fernández aduce, asimismo, que de los seis fiscales convocantes, dos “fueron acusados por familiares de las víctimas de obstaculizar la causa AMIA y la tarea del propio Nisman” que investigaba el atentado contra esa mutual judía.

Cabe recordar que el fiscal Alberto Nisman, encargado del caso del atentado en la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA, que dejó 85 muertos y más de 300 heridos), acusó a la mandataria Cristina Fernández y a Héctor Timerman de encubrir evidencias sobre el caso.

Sobre Nisman pesaban acusaciones de mantener estrechos vínculos con los servicios y funcionarios norteamericanos. De hecho, documentos publicados en 2010 por Wikileaks desvelan sus contactos con personal de la embajada de EE. UU. en Buenos Aires, capital argentina

En otro párrafo, la jefa de Estado, recordando que tiene por  costumbre analizar, evaluar y luego opinar sobre cualquier hecho, se refiere “al reproche” por su “silencio” y agrega que  “resulta curioso que cuando hablo de lo que algunos no quieren, un fiscal me exige que me calle, y cuando no hablo de lo que ellos quieren, me reclaman que hable. En síntesis: la palabra y el silencio, parecen tener dueños en la Argentina”.

Fernández ha fustigado a los medios, para los cuales 400 mil personas participaron en la marcha que, volvió asegurar, no fue para homenajear a Nisman "con la obvia excepción de sus familiares directos". La Policía Federal cifra en 50 000 la asistencia.

De acuerdo a recientes análisis, el Gobierno de Fernández se enfrenta a un golpe de Estado blando en el que está involucrado EE.UU.

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