En su intervención en una reunión mantenida a través de videoconferencia con los residentes de la provincia de Al-Hudayda (oeste), el líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdulmalik al-Houthi, ha aseverado este viernes que las brutales agresiones de la llamada coalición liderada por Riad, ponen en práctica los objetivos estadounidenses e israelíes.
“Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos son sumisos ante Estados Unidos e Israel”, ha sostenido denunciando que los “criminales” saudíes y emiratíes llevaron a cabo conspiraciones del régimen sionista y EE.UU. contra la nación yemení.
Al-Houthi ha elogiado la resistencia del pueblo de Yemen, especialmente la de los pobladores de Al-Hudayda, que han hecho frente a las acometidas con lo poco que tienen.
El titular yemení ha criticado que el “asesinato en masa” y la “destrucción planeada” de la coalición agresora en Al-Hudayda, ha señalado que esta provincia se ha convertido en un símbolo de la resistencia del pueblo de Yemen enfatizando que la coalición agresora es muy opresiva y tirana, porque impuso una guerra al pueblo yemení sin ninguna justificación legítima.
A la cabeza de varios de sus aliados, la monarquía saudí lanzó una brutal campaña militar contra Yemen en marzo de 2015 y, desde entonces, ha matado a decenas de miles de civiles yemeníes mediante bombardeos directos.
Con el fin de aumentar las presiones, la coalición agresora ha impuesto desde noviembre de 2016 un asedio económico a Yemen, el cual impide que los envíos de combustible lleguen a este país, mientras que saquea los recursos de la empobrecida nación yemení.
Arabia Saudí y sus aliados impiden la llegada de ayuda humanitaria a Yemen y han atacado, además, en múltiples ocasiones, convoyes de ayuda de las Naciones Unidas compuestos por varios camiones llenos de alimentos y medicamentos, en diferentes provincias yemeníes, como Al-Hudayda.
msm/ctl/rba