“Los servicios de Inteligencia de Arabia Saudí, Turquía y Catar han ordenado a los terroristas que vuelvan a la fase previa al alto el fuego”, ha señalado este domingo el titular sirio, en declaraciones recogidas por la agencia estatal siria SANA.
Desde finales del pasado febrero, en Siria rige un alto el fuego impulsado por Rusia y EE.UU., del que son excluidos los grupos terroristas EIIL (Daesh, en árabe) y el Frente Al-Nusra, rama siria de Al-Qaeda, si bien, Rusia ha registrado un sinfín de violaciones del armisticio por otros grupos armados.
“Los servicios de Inteligencia de Arabia Saudí, Turquía y Catar han ordenado a los terroristas que vuelvan a la fase previa al alto el fuego”, ha indicado el ministro sirio de Información, Omran al-Zoubi.

A este respecto, Al-Zoubi subrayó que la intensificación de las ofensivas por “terroristas”, teniendo como blanco a la “población civil”, refleja su “confusión” debido a las derrotas que han sufrido sobre el terreno por el Ejército sirio y su fracaso en las negociaciones de paz en Ginebra (Suiza).
De hecho, se ha referido a la salida del denominado Alto Comité de Negociaciones (HNC, en inglés), apoyado por Arabia Saudí, de los diálogos indirectos entre los representantes de Damasco y otros grupos de la oposición que comenzaron el pasado 13 de abril en Ginebra bajo la égida de Naciones Unidas.
El ministro sirio también ha expresado su confianza en la capacidad del pueblo sirio para derrotar el terrorismo, al tiempo que elogió la resistencia presentada por los residentes de la provincia septentrional de Alepo contra las ofensivas de dichas bandas.
“El liderazgo de Siria nunca va a renunciar ni una pulgada del territorio sirio, sin importar cuánto tiempo podría durar la crisis”, ha apostillado.
Desde marzo de 2011, Siria atraviesa un conflicto que ha dejado más de 270.000 muertos, en su mayoría civiles, de acuerdo con las últimas cifras divulgadas por el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), con sede en el Reino Unido.
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