Es necesario que las autoridades (de EE.UU.) aborden seriamente las causas que provocaron esta situación
El comisionado para los Derechos Humanos (DDHH) de la Cancillería rusa, Konstantin Dolgov se refirió el martes a los últimos incidentes en la ciudad de Baltimore (noreste de EEUU), y tras basarse en las estadísticas realizadas por los activistas estadounidenses, denuncnió que desde mayo de 2013 hasta la actualidad, “se registraron en EE.UU. como 1450 casos de asesinato accidental” de ciudadanos a manos de la policía.
La mayoría de las víctimas de abuso fatal policial son los afroamericanos, casi siempre desarmados. “Es muy raro ver a un policía (asesino) enjuiciado o las condenas son muy leves”, lamentó.
A este respecto, indicó que según las cifras, los ciudadanos negros de EE.UU. mueren 21 veces más que los blancos en enfrentamientos con los agentes policiales.
“Es necesario que las autoridades (de EE.UU.) aborden seriamente las causas que provocaron esta situación”, subrayó.

Los disturbios que han paralizado Baltimore se desencadenaron la noche del lunes poco después del funeral de Freddie Gray, el joven negro de 25 años que perdió la vida el pasado 19 de abril, tras sufrir una grave herida en la espina dorsal como consecuencia de la golpiza policial que recibió durante su detención el 12 de abril.

En estas protestas más de 200 personas resultaron detenidas y hubo 144 vehículos incendiados.
Asimismo, pese al decreto de toque de queda en Baltimore y el masivo despliegue de la Guardia Nacional y agentes del orden, los ciudadanos y activistas pro derechos humanos protagonizaron la noche del martes otra manifestación para mostrar su indignación por incesantes asesinatos de ciudadanos negros por los efectivos de seguridad, aunque la policía reprimió la pacífica movilización usando gases lacrimógenos y bombas de humo.
La muerte de Gray se produce en un momento de gran tensión en EE.UU. entre los distintos cuerpos de policía y la comunidad, después de que durante los últimos meses hayan tenido lugar varios casos de abuso policial con resultados mortales.
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