“Los estadounidenses pidieron a las autoridades paquistaníes que facilitaran el ingreso de algunas personas al territorio de Irán y les proporcionasen el apoyo necesario durante las recientes protestas”, informó el miércoles el servicio local de noticias Paktribune, citando a un diplomático paquistaní.
Además, precisó que la petición, que procedía del presidente de EE.UU., Donald Trump y fue transmitida por el embajador norteamericano en Islamabad, buscaba “fomentar y utilizar los disturbios civiles contra el Gobierno” iraní.
No obstante, Paquistán dio una “respuesta decisiva” y “fuerte” a la solicitud de Estados Unidos, destacando que las relaciones entre Islamabad y Teherán son “tan importantes y estratégicas” que no quería socavarlas, según el informe.
Los estadounidenses pidieron a las autoridades paquistaníes que facilitaran el ingreso de algunas personas al territorio de Irán y les proporcionasen el apoyo necesario durante las recientes protestas”, según informó el servicio local de noticias Paktribune.
Paktribune remarcó también que Islamabad “nunca interfiere de ninguna manera en los asuntos internos de los países vecinos” y tachó de “tensas” las políticas de Trump en la región de Oriente Medio.
A finales del pasado diciembre, algunas ciudades de Irán fueron escenario de manifestaciones pacíficas contra la inflación y el desempleo, pero más tarde, por la intervención de elementos extraños, se convirtieron en violentas.
Dicha violencia, supuestamente, fue fruto de la infiltración de secuaces de los enemigos de Teherán, es decir, EE.UU. y el régimen de Israel, que aprovecharon la oportunidad para atentar contra la Revolución Islámica; no obstante, este intento como otros anteriores también fue neutralizado con el apoyo del pueblo iraní.
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