La discriminación hacia los pueblos originarios de Panamá continúa siendo un tema común. Al momento de una fotografía para la cédula de identidad personal en el Tribunal Electoral, a la señora Laura Arosemena le exigieron quitarse el “olasu”, una argolla de oro tradicional en las mujeres de la etnia Guna, uno de los 7 pueblos autóctonos del país centroamericano.
Los Guna además denuncian actitudes desleales relacionadas al turismo de veleros dentro del área comarcal y el intento de ser expropiados de la administración de la ruta que lleva pasajeros desde la Ciudad Capital hasta la comarca Guna Yala.
Proyecciones de la Contraloría General estiman que para el año 2020 la población indígena de Panamá rondaría los 550 mil habitantes, panameños que permanecen en resistencia, buscando el reconocimiento y respeto de sus culturas por parte del Estado y su administración.
John Alonso, Ciudad de Panamá.
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