Según informó el miércoles el rotativo israelí The Times of Israel, citando al Canal 13 israelí, los registros de Nir Hefetz, exportavoz de Netanyahu, contienen información y evidencias sobre los gastos ilegales en los que han incurrido el primer ministro israelí y los miembros de su familia.
Fuentes citadas por el mencionado canal aseguran que los registros de Hefetz comprenden varios años de gastos de los Netanyahu y, por esta razón, se han convertido en una de las evidencias principales en las investigaciones sobre los casos de corrupción en los que está involucrado el premier.
En concreto, contienen pruebas de que el primer ministro del régimen israelí llegó a aprovecharse de los vehículos pertenecientes a varios de los ministerios israelíes para que le llevaran comida preparada en las instituciones públicas israelíes, en la ciudad de Al-Quds (Jerusalén), a su residencia privada en Cesarea (Qaysaria), algo que viola las leyes israelíes.
Del mismo modo, los registros arrojan que en varias ocasiones el primer ministro exigió que se dedicasen fondos al mantenimiento y las reparaciones de su casa en Cesarea, mientras que también usó los fondos públicos para pagar, en varias ocasiones, las facturas de varios restaurantes.
Los registros detallan constantes solicitudes de fondos públicos para cubrir los gastos del mantenimiento de la piscina de la casa en Cesarea, las facturas de restaurantes de los Netanyahu y una larga lista de otros gastos personales”, dice el informe del Canal 13 israelí sobre los gastos ilegales en los que ha incurrido el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
“Los registros detallan constantes solicitudes de fondos públicos para cubrir los gastos del mantenimiento de la piscina de la casa en Cesarea, las facturas de restaurantes de los Netanyahu y una larga lista de otros gastos personales”, dice el informe del Canal 13 israelí.
La policía del régimen israelí ha acusado formalmente a Netanyahu por una serie de cargos derivados de indagaciones por el Caso 1000, que investiga la recepción de regalos de lujo por valor de 282 000 dólares a cambio de favores, y los Casos 2000 y 4000, que analizan posibles pactos o intercambio de favores a cambio de coberturas favorables en importantes grupos de comunicación.
Netanyahu no es el único funcionario israelí sujeto a investigaciones por supuestos cargos de corrupción, pues su esposa, Sara, también es acusada de malversación de fondos públicos, mientras varias otras autoridades, como el ministro del interior, Arie Deri, es investigado por fraude.
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