"Estamos frente al grupo Daesh (acrónimo en árabe del EIIL), que nos declaró la guerra. Debemos desarrollar esta guerra, por todos los medios, respetando el derecho, porque estamos en una democracia", ha declarado Hollande este martes durante una visita a la iglesia de Saint-Etienne-du-Rouvray, en la localidad de Normandía (norte), donde tuvo lugar la toma de rehenes.
De igual manera, ha condenado el mencionado “innoble atentado”, en el que “dos terroristas que decían ser de Daesh”, antes de ser abatidos por agentes de la Policía gala, degollaron a un cura e hirieron gravemente a otra persona.
Estamos frente al grupo Daesh (acrónimo en árabe del EIIL), que nos declaró la guerra. Debemos desarrollar esta guerra, por todos los medios, respetando el derecho, porque estamos en una democracia", dice el presidente de Francia, François Hollande.
Mientras tanto, la agencia de noticias Amaq, vinculada a la agrupación extremista, ha divulgado un mensaje en el que reivindica la autoría del incidente. “Dos soldados de Daesh” realizaron el ataque a la iglesia, indica.
El mandatario francés ha hecho, además, un llamado a los franceses a "estar juntos" y a hacer "un bloque que nadie pueda fracturar", a fin de evitar que se produzcan sucesos como el de Normandía, que, a su juicio, ha ido dirigido contra "todos los católicos" y también contra "todos los franceses".

Las condenas en Francia tras lo sucedido no se limitan a la de Hollande. El primer ministro francés, Manuel Valls, tras expresar su preocupación por la situación crítica que se vive en territorio galo, ha lamentado el "horror" del ataque en Saint-Etienne-du-Rouvray y ha llamado a “hacer bloque” frente a incidentes de este tipo.
Al sumarse este reciente suceso al atentado de París (capital francesa) y al registrado en la ciudad costera de Niza, ambos reivindicados por Daesh, Francia se ha convertido en el país europeo que más ha sufrido las amenazas y los ataques de los extremistas de la mencionada banda.
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