El Ministerio Público de Guatemala se ha empecinado en continuar la cruzada en contra del partido Semilla, el presidente electo y los 23 diputados que entraron en la Legislatura 2024-2028 por medio de esa agrupación política. De esa cuenta las protestas ciudadanas han proliferado. Este lunes, 28 de agosto, los reclamos fueron encaminados contra la fiscal general del Ministerio Público y el jefe de la Fiscalía contra la Impunidad, Rafael Curruchiche.
Rafael Curruchiche es quien abandera la misión de cancelar el partido por supuestas irregularidades en la conformación del mismo. De acuerdo a personas cercanas al fiscal, lo que se prepara es no dejar que Bernardo Arévalo tome posesión del cargo el próximo 14 de enero. Asociaciones indígenas reclaman la persecución y reiteran su respaldo al presidente electo.
Para analistas que han visto de cerca el proceso electoral, lo único que provoca el Ministerio Público y el organismo judicial es una desestabilización permanente que amenaza la alternación de poderes. Advierten que se vienen más manifestaciones y desafíos ciudadanos.
Los ataques contra el partido son tan focalizados que todo el andamiaje del Ministerio Público por medio de la Fiscalía Especial contra la Impunidad no ha hecho por investigar a otros partidos de los 30 que participaron en la contienda electoral sino únicamente a Semilla.
De momento al binomio presidencial electo le fueron otorgadas medidas cautelares ordenadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) debido a planes para asesinarlos descubiertos por la fiscalía contra las extorsiones.
Miguel Salay, Ciudad de Guatemala.
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