Rusia critica construcción de muro en su frontera con Ucrania

El jefe del Servicio de Fronteras de Rusia, Konstantín Busiguin, tachó el viernes de “inútil” el proyecto de construcción de un muro en la frontera entre Rusia y Ucrania anunciado por el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk. "Es una medida inútil desde el punto de vista económico y político", precisó Busiguin para después explicar que Kiev está gastando "fondos que por el momento no tiene" esperando que la Unión Europea (UE) financie el proyecto, algo que no ocurrirá, ya que, insistió, “Bruselas sabe contar". El funcionario ruso hizo estas afirmaciones en alusión a las declaraciones de Yatseniuk sobre la construcción de instalaciones en la frontera, prevista por el denominado proyecto Muro, el cual se realiza con fondos presupuestarios y finalizaría en los próximos tres años. A su juicio, las acciones de las autoridades ucranianas carecen de cualquier sentido común. "Alemania estuvo dividida pero el muro acabó derribado; si construyen otro en Ucrania, le espera el mismo destino", concluyó. Los guardias fronterizos ucranianos parecen estar trabajando arduamente para terminar esa edificación tan pronto como sea posible, pues el jefe del Servicio de Fronteras de Ucrania, Victor Nazarenko afirmó esta misma jornada que las tareas de construcción del muro siguen desarrollándose con normalidad, es más se han instalado hasta el momento 135,54 kilómetros de zanjas antitanque y 86,42 kilómetros de barreras artificiales. Las autoridades ucranianas siguen con el ambicioso plan, mientras a principios de esta semana, el secretario general del Consejo Europeo, Thorbjorn Jagland, calificó de “inaceptable” la construcción del muro en la frontera de Ucrania y Rusia. "Han pasado 25 años desde la caída del Muro de Berlín, no es un buen momento para empezar a construir nuevos muros en Europa, lo debemos evitar (…)”, adujo. El pasado mes de septiembre, Kiev aprobó un plan para construir instalaciones de protección en la frontera con Rusia. Un total de 16 de los 65 puestos de control en este límite fueron cerrados temporalmente. El proyecto que busca reforzar 2295 kilómetros de frontera ruso-ucraniana dentro de seis meses costará alrededor de 7,7 millones de dólares. Moscú y Kiev llevan meses acusándose mutuamente. El Gobierno ucraniano, junto a países occidentales encabezados por EE.UU., acusa a Rusia de haber enviado tropas al este del país en apoyo a los prorrusos que solicitan la autodeterminación de las regiones de mayoría rusohablantes, mientras la parte rusa rechaza estas alegaciones. mep/ctl/mrk