• Fuerzas policiales montan guardia durante el registro del centro social ocupado autogestionado La Quimera, en la capital de España, Madrid. 30 de marzo de 2015
Publicada: martes, 31 de marzo de 2015 1:36

Agentes policiales españoles detuvieron ayer lunes a 28 personas en el marco de una operación que incluyó registros en ciudades de todo el país europeo, en particular en centros sociales ocupados y autogestionados, provocando numerosas manifestaciones populares de protesta.

“¡Basta ya de Estado policial!” o “¡Nos tocan a una, nos tocan a todas!” eran algunas de las consignas coreadas en las concentraciones de repulsa  llevadas a cabo horas después del operativo en la capital, Madrid, y en otras ciudades afectadas como Barcelona, Palencia, Zaragoza, Salamanca, Gerona, Cuenca y Granada, con miles de participantes.

La acción policial, continuación de la Operación Pandora efectuada en diciembre, fue lanzada a las 6 de la mañana (hora local) por la Policía Nacional y las Brigadas de Información de varias ciudades, por orden del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, informa el periódico colaborativo Diagonal.

A 14 de las personas detenidas, las autoridades españolas las acusan de pertenecer a unos supuestos Grupos Anarquistas Coordinados (GAC), a los que califican de terroristas, imputándoles “sabotajes y colocación de artefactos explosivos e incendiarios”. A las otras 14 personas se les recrimina “resistencia a la autoridad” durante los registros.  

A lo largo del día, las acusaciones han suscitado escepticismo, incredulidad, mofa e indignación entre numerosos activistas y usuarios de redes sociales, que se han llenado de mensajes de apoyo a los detenidos y protesta por el creciente acoso a los medios libertarios con distintivos como #YoTambiénSoyAnarquista y #AtaqueALosCSOAS.

De los 17 puntos registrados en Madrid, Barcelona (noreste), Palencia (norte) y Granada (sur), 6 han sido en centros sociales ocupados y autogestionados, algunos de ellos focos de gran actividad educativa y de cooperación social altruista, como los madrileños La Quimera y 13-14.

La irrupción policial en los centros, confrontados en permanencia a amenazas de desalojo definitivo por parte de las autoridades, ha creado gran inquietud entre los millares de personas que se benefician de las actividades que se desarrollan en estos lugares.

“Desde un tiempo a esta parte hay un plan claro desde Delegación del Gobierno en este sentido, y todos los desahucios que se convocan son ejecutados, en medio de un despliegue policial cada vez mayor”, se inquieta un miembro de la autoproclamada Oficina de Vivienda de Madrid, de nombre Daniel, en declaraciones a la página de periodismo independiente La Marea.

El militante advierte del peligro que corre en particular el denominado Patio Maravillas, también en Madrid, cuyas redes desempeñaron un papel capital en el lanzamiento del movimiento 15-M, que en mayo de 2011 sacudió la conciencia de la sociedad española ante la situación de crisis en que se halla y ha cristalizado posteriormente en formaciones políticas como Podemos.

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