• Influencia latina en la lucha contra el comunismo europeo
Publicada: jueves, 18 de abril de 2019 4:55
Actualizada: jueves, 18 de abril de 2019 6:04

Más de 50 mil personas se estima que murieron en Latinoamérica durante los años de las dictaduras derechistas de las décadas de los 70 y 80.

Fueron víctimas de la Operación Cóndor, una red militar clandestina que capturaba, torturaba y asesinaba a disidentes de izquierdas.

Esta semana, se ha conocido que el Reino Unido, Francia y Alemania no sólo sabían de los hechos, sino que acudieron a Buenos Aires para estudiar, y posiblemente implementar en Europa.

Más de 40 años después del inicio del conocido como Operación Cóndor, aún se desconoce el número total de las decenas de miles de muertos, secuestrados y desaparecidos en Latinoamérica durante las dictaduras derechistas de los años 70 y 80.

Militares de Chile, Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, con los Estados Unidos, ejercieron de forma coordinada terrorismo de Estado contra todo aquel considerado “subversivo”, con prácticas que incluían el secuestro, la tortura y el asesinato.

Documentos revelados por la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) muestra como representantes del Reino Unido, Francia y Alemania Occidental viajaron a Buenos Aires en 1977 para conocer en detalle estas prácticas y estudiar su implantación en Europa.

En 1977, el laborista James Callaghan lideraba el Gobierno en el Reino Unido. En una época conocida como el invierno del descontento, marcada por el alto paro, la alta inflación y los grandes movimientos sindicales. ¿Podría ser que el Gobierno británico esta temiendo una influencia soviética en los movimientos obreros británicos?

Desde que destaparon los hechos en los años 90 con los conocidos como Documentos del Horror, varios centenares de militares en Latinoamérica han sido juzgados y encarcelados.

Hoy se sabe que esta trama llegó hasta Europa, pero por el momento, ningún miembro del Gobierno o del Ejército británico se han sentado en el banquillo de los acusados.

Ian Diez, Londres.

akm/alg