El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en una conversación telefónica este domingo con su homólogo venezolano, Yván Gil, ha condenado el nuevo ataque estadounidense contra una embarcación en aguas del Caribe cerca de Venezuela.
“Rusia condena contundentemente el último ataque estadounidense del 3 de octubre contra una embarcación en aguas internacionales cercanas a Venezuela”, ha declarado Lavrov, según un comunicado de la Cancillería rusa.
Cuatro personas murieron en el ataque del 3 de octubre al barco al que Washington acusó de transportar “cantidades sustanciales de narcóticos, con destino a Estados Unidos para envenenar a nuestro pueblo”.
De acuerdo con el informe, ambos ministros han expresado su profunda preocupación por “la escalada de las acciones de Washington en el Caribe”, que conllevan graves consecuencias para la región, subrayando que el ataque se produjo contra un buque en aguas internacionales.
En este contexto, los cancilleres venezolano y ruso han advertido sobre posibles vinculaciones entre la guerra declarada contra el narcotráfico por Estados Unidos y la situación en Haití.
En este sentido, han alertado contra “los intentos de interpretar de forma extensiva” una reciente resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) para duplicar el tamaño de una misión de seguridad internacional de 15 meses de antigüedad, con fondos y personal insuficientes, que combate a las pandillas armadas en Haití.
La diplomacia rusa ha sostenido que dicha interpretación busca “centrar la atención en la lucha contra el narcotráfico venezolano, que supuestamente alimenta el crimen organizado en la región”.
Asimismo, Moscú ha reafirmado su “amplio apoyo y solidaridad con los dirigentes y el pueblo de Venezuela en el contexto actual”, y ha enfatizado el compromiso con los principios de soberanía y no injerencia en asuntos internos.
Rusia está comprometida con preservar América Latina y el Caribe como zona de paz
Por su parte, el jefe de la diplomacia venezolana ha denunciado las constantes amenazas de intervención militar por parte de ciertos sectores políticos estadounidenses y la importancia de mantener la estabilidad regional.
“Recibimos la plena expresión de apoyo y solidaridad del gobierno ruso con Venezuela, así como su compromiso con la preservación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz”, ha subrayado Gil.
Desde agosto pasado, las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela han aumentado tras el despliegue de más de 4000 efectivos cerca de las costas venezolanas, junto a ocho barcos militares con misiles y un submarino de propulsión nuclear, además del envío de diez aviones de combate F-35 a una base aérea en Puerto Rico, bajo el pretexto de enfrentar a los cárteles de la droga.
Ante ello, Venezuela ha movilizado al pueblo para recibir entrenamiento en el uso de armas y estar listos en caso de que tengan que defenderse ante una eventual intervención militar.
nsh/ncl/tmv
