A través de un comunicado publicado este martes en el portal web del Registro Federal de EE.UU., el Departamento norteamericano de Estado ha introducido nuevas sanciones contra dos compañías rusas y un centro de entrenamiento militar, a los que acusa de violar las leyes nacionales estadounidenses de no proliferación de armas de destrucción masiva en relación con sus actividades con Irán, Corea del Norte y Siria.
Según el texto, las medidas restrictivas se pusieron en marcha el pasado 14 de mayo. La nueva ‘lista negra’ incluye, además de las entidades rusas mencionadas, varios bufetes de abogados de China y Siria.
La nueva medida estadounidense fue aprobada por Christopher Ford, asesor del secretario de Estado de EE.UU. para la Seguridad Internacional y la No Proliferación.
Además, el plazo de vigencia de estas medidas restrictivas es de dos años, pero puede reducirse o finalizar por iniciativa del secretario estadounidense de Estado, Mike Pompeo.
Este hecho tiene lugar después de que el jueves, el Departamento del Tesoro de EE.UU. sancionara a un cuerpo de seguridad de Chechenia, conocido como Fuerzas Especiales de Respuesta Rápida del Terek, y a su comandante, Abuzayd Vismurádov, así como a cuatro individuos de nacionalidad rusa, instrumentalizando la Ley Magnitski.
En respuesta, la Cancillería de Rusia tildó el viernes de contraproducentes e ilegales las nuevas sanciones impuestas por Washington en contra del país euroasiático. “Es una línea profundamente deficiente y contraproducente que no permite sacar las relaciones bilaterales de un callejón sin salida”, denunció.
El Ministerio ruso de Exteriores también insistió en que las medidas punitivas contra Rusia son ilegales y advirtió a las autoridades estadounidenses que Moscú no dejará sin respuesta acciones como estas.
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