El Departamento del Tesoro de EE.UU., en coordinación con Francia, ha aplicado este miércoles nuevas sanciones contra ocho personas y cinco entidades por su presunta colaboración con el programa de armas químicas de Damasco.
La subsecretaria para Terrorismo e Inteligencia Financiera del Departamento del Tesoro estadounidense, Sigal Mandelker, señala en su comunicado que los sancionados son “componentes clave en una vasta red para adquirir productos electrónicos” destinados al Centro de Estudios e Investigación Científica de Siria (SSRC, por sus siglas en inglés).
Entre las organizaciones sancionadas por Washington figuran Electronics Katrangi Trading (EKT), una empresa basada en El Líbano presentada como uno de los principales abastecedores del Centro de Estudios e Investigaciones sirio.
Amir, Maher, Hussam y Mohamad Katrangi, así como Mireille Chahine figuran igualmente en la lista por haber actuado en nombre de esa empresa. También aparecen la empresa EKT Smart Technology y su director, el chino Zhou Yishan, y otra compañía ligada a EKT, Golden Star Co.
El reclamo de EE.UU. sobre la existencia de un programa de armas químicas en Siria por parte del Gobierno de EE.UU. se produce pese a que Damasco destruyó todo su arsenal químico en 2013, tal como ha corroborado la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
En este sentido, Estados Unidos y algunos países europeos, como Francia y el Reino Unido, han denunciado que el Gobierno del presidente de Siria, Bashar al-Asad ha realizado dos ataques químicos, uno en la provincia siria de Idlib (noroeste) y otro en la región de Guta Oriental, en el este de Damasco (la capital).
So pretexto de presunto ataque en Guta Oriental, EE.UU., el Reino Unido y Francia lanzaron el pasado 14 de abril una ofensiva militar a gran escala contra Siria, sin contar con la autorización del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) y antes de que terminaran las investigaciones de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
El Gobierno sirio niega haber lanzado ataques químicos contra su pueblo y acusa a los países occidentales, bajo la tutela de Washington, de escenificarlos para tensar la situación y justificar sus intervenciones militares en Siria.
snz/ncl/mjs/rba