Algunas sanciones estarían dirigidas contra una compañía de servicios petroleros administrada por militares venezolanos y otras, destinadas a restringir la cobertura asegurada de los embarques de crudo del país suramericano, precisó el funcionario norteamericano, que habló bajo condición de anonimato con la agencia de noticias británica Reuters.
Mientras Maduro busca la reelección en los adelantados comicios de abril, cuya celebración se enfrenta a la oposición de Washington y sus aliados, Estados Unidos busca imponer una serie de sanciones que apuntarían al vital sector petrolero de Venezuela y a figuras militares y políticas de alto nivel, como Diosdado Cabello, el primer vicepresidente del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
De cualquier modo, agregó la fuente, el Gobierno del presidente Trump sopesa aplicar algunas sanciones antes de las elecciones, pero también hay otras que están siendo pensadas para imponerlas después del 22 de abril, fecha en que los venezolanos irán a las urnas.
Creo que (esto causaría) una sacudida bastante fuerte en el mercado del petróleo en el corto plazo (...) Las sanciones petroleras no se deben tomar a la ligera (...) esto implicaría una escalada bastante fuerte para la política estadounidense, ya sea si se trata de una sanción a todo el sector petrolero o medidas diferentes escalonadas”, pronosticó un funcionario estadounidense.
Entre las sanciones más duras, Washington considera una eventual prohibición a gran escala de las exportaciones estadounidenses de crudo de Venezuela, que el año pasado fue el cuarto proveedor de crudo y productos petroleros de EE.UU.
“Creo que (esto causaría) una sacudida bastante fuerte en el mercado del petróleo en el corto plazo (...) Las sanciones petroleras no se deben tomar a la ligera (...) esto implicaría una escalada bastante fuerte para la política estadounidense, ya sea si se trata de una sanción a todo el sector petrolero o medidas diferentes escalonadas”, pronosticó el funcionario estadounidense.
El presidente Maduro, en la lista negra de Washington desde el año pasado, ha tachado anteriormente de ‘ridículas’ e ‘ilegales’ las sanciones de Estados Unidos y considera que la Casa Blanca está detrás de los problemas económicos de su país.
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