La fiscalía encargada del juicio por las heridas mortales que sufrió Gray estando detenido por la policía ha anunciado la retirada de cargos contra los agentes Garrett Miller, William Porter y Alicia White.
Esta decisión llega después de que un juez exculpara en mayo de todos los cargos a los tres primeros policías acusados en el caso, incluido el conductor, que enfrentaba más responsabilidad.
Según el fiscal estadounidense, Gray fue detenido en abril de 2015 de forma ilegal cuando se alejaba de una bicicleta. Luego el joven fue reducido e introducido en un vehículo. Los agentes en cuestión están acusados de no sujetarlo con el cinturón y de no llevarlo al hospital cuando pidió atención médica.
Desde entonces, la muerte de Gray se ha convertido en símbolo de la violencia policial contra los afrodescendientes en EE.UU. y ha provocado diversas manifestaciones de protesta por el racismo policial en el país norteamericano.
Con la nueva medida de la Justicia estadounidense, ninguno de los seis policías inicialmente procesados será, por tanto, condenado en este caso, lo cual podría desencadenar más disturbios por la muerte de Gray.
El hecho se produce mientras la brutalidad policial en EE.UU., sobre todo contra la comunidad afroamericana y las minorías, ha suscitado críticas de diversas organizaciones, como el grupo de derechos civiles Black Lives Matter ("las vidas de los negros importan", en inglés) que se reavivó de manera especial con el caso de Gary.
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