Altos funcionarios estadounidenses han informado que Kerry ha abordado el caso durante las conversaciones telefónicas por separado con sus pares de Irán y Arabia Saudí, Mohamad Yavad Zarif y Adel al-Yubeir, respectivamente.
“Estamos exhortando a la calma y a reducir la tensión. La situación debe distenderse”, han dicho las fuentes estadounidenses, que hablaron bajo condición de anonimato a la agencia francesa de noticias AFP.
Todo empezó cuando el Ministerio saudí del Interior informó el pasado sábado de la ejecución de 47 personas, incluido el prominente clérigo chií el sheij Nimr Baqer al-Nimr, por supuestos cargos de terrorismo, acto que provocó la ira de la comunidad chií en todo el mundo.
Los iraníes, así como otros pueblos chiíes, protagonizaron varias protestas en rechazo a la medida de Riad. Empero a Riad no le gustaron las concentraciones de los iraníes frente a las representaciones diplomáticas saudíes, por lo que rompió todas las relaciones diplomáticas con el país persa.
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