• La embajada de Canadá en Riad, Capital de Arabia Saudi.
Publicada: lunes, 6 de agosto de 2018 15:57

Canadá ha expresado su seria preocupación por la expulsión de su embajador de Arabia Saudí, por criticar la situación de derechos humanos en el país árabe.

“Estamos seriamente preocupados por esta información de prensa y estamos esperando saber más sobre la reciente declaración del reino de Arabia Saudí”, ha comunicado la portavoz del Gobierno canadiense, Marie-Pier Baril.

Pese a la mediada de Arabia Saudí contra Canadá, Baril ha asegurado que el Gobierno canadiense “defenderá siempre la protección de los derechos humanos (DD.HH.), en especial los derechos de las mujeres y la libertad de expresión en todo el mundo”.

Asimismo, mediante el referido comunicado el Ejecutivo canadiense declaró “crucial para la diplomacia internacional”, promover los valores de los DD.HH.

El régimen de Al Saud anunció el lunes su decisión de expulsar al embajador de Canadá en Riad (capital de Arabia Saudí) y retirar a su propio embajador de Ottawa (capital canadiense) después de que la embajada de Canadá en el país árabe hiciera un llamado para la “liberación inmediata de activistas de derechos humanos encarcelados” por el régimen saudí.

Estamos seriamente preocupados por esta información de prensa y estamos esperando saber más sobre la reciente declaración del reino de Arabia Saudí”, ha comunicado el portavoz del Gobierno de Canadá, Marie-Pier Baril, en referencia al anuncio del régimen saudí sobre la expulsión del embajador canadiense por criticar los derechos humanos en el país árabe.

 

En esta misma línea, Riad al tachar de “injerencia” las censuras de las autoridades canadienses, anunció el domingo la congelación de todas relaciones comerciales con Canadá además de suspender los programas de intercambio educativo con el país norteamericano.

La violación y falta de respeto a los derechos humanos por parte de la monarquía árabe ha sido criticada en reiteradas ocasiones por varios países y las organizaciones internacionales. A este respecto, el 31 de julio, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenó la ‘detención arbitraria’ de los activistas en Arabia Saudí.

Asimismo, sigue siendo uno de los países más restrictivos del mundo para las mujeres, a las que por ejemplo se exige la aprobación de un tutor masculino para tomar decisiones importantes.

De igual modo, Arabia Saudí tiene historiales de ejecución de opositores al régimen (entre los que destaca el prominente sheij chií Nimr Baqer al-Nimr) y de uso de la tortura, razón por la que es muy condenado y criticado por grupos activistas pro derechos humanos.

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