• El primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, da una conferencia en Tel Aviv, 27 de marzo de 2018.
Publicada: martes, 27 de marzo de 2018 17:05
Actualizada: martes, 27 de marzo de 2018 23:47

Exdirectores del servicio de inteligencia de Israel (el Mossad) han arremetido este martes contra el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, por su implicación en casos de corrupción y por sus criticadas políticas, que han puesto en peligro el futuro de este régimen.

Durante una entrevista concedida al periódico israelí Yedioth Ahronoth, seis exespías israelíes, entre ellos Danny Yatom —que estaba a cargo del Mossad a finales de la década de 1990—, han criticado a Netanyahu y han denunciado las investigaciones de corrupción en curso contra el premier, afirmando que Netanyahu y sus secuaces han antepuesto “sus intereses a los intereses” del régimen de Tel Aviv.

Además, han reprobado sus políticas en relación con el conflicto con los palestinos, pues, en su opinión, amenazan a este régimen.

Las preocupaciones de Yatom fueron compartidas por Zvi Zamir (1968-1974), quien ha insistido en que Israel “está enfermo” y que Netanyahu es directamente responsable de la situación actual.

“Estamos en un estado médico crítico. Podría decirse que (el régimen) presentó síntomas cuando Netanyahu asumió el poder, pero lo ha llevado a la grave condición de una enfermedad maligna”, ha declarado Zamir.

Estamos en un estado médico crítico. Podría decirse que (el régimen) presentó síntomas cuando Netanyahu asumió el poder, pero lo ha llevado a la grave condición de una enfermedad maligna”, ha declarado el exdirector del Mossad Zvi Zamir (1968-1974).

 

Según la agencia británica de noticias Reuters, la oficina de Netanyahu no ha respondido de inmediato a estas acusaciones, aunque el ministro israelí de educación, Naftali Bennett, las ha refutado alegando que Israel “se encuentra en una excelente condición”.

El premier israelí es sospechoso en varios casos de corrupción, que incluyen aceptación de sobornos y caros obsequios, así como tráfico de influencias. Su mujer enfrentaba también una investigación sobre una serie de presuntos delitos de fraude y abuso de fondos en un caso relacionado con gastos excesivos de comidas y cáterin en la residencia oficial del primer ministro.

El lunes, la policía interrogó a Netanyahu por el caso de corrupción denominado “Caso 4000” vinculado con la mayor empresa de telecomunicaciones israelí, uno de los tres escándalos que pesan sobre su futuro político.

Netanyahu también fue interrogado sobre las sospechas de que ha obstruido las investigaciones que pesan contra él y su esposa, basándose en el testimonio dado por Nir Hefetz, un antiguo asesor de medios y ahora testigo protegido de la fiscalía israelí. 

Como consecuencia de estos casos escandalosos, de vez en cuando los israelíes salen a las calles para exigir su dimisión; no obstante, el premier parece no tener planes de dejar el poder.

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